Las SICAVs (Sociedades de Inversión de Capital Variable) son un tipo de Institución de Inversión Colectiva (IICs) que permiten a los inversores agrupar su capital para invertir en diversos instrumentos financieros. Se caracterizan por tener una fiscalidad ventajosa y flexibilidad en la gestión de sus inversiones. Aquí dejamos cuatro razones para considerar invertir en SICAVs:
Fiscalidad favorable:
Las SICAVs se benefician de una tributación reducida en comparación con otros productos de inversión. Los beneficios generados dentro de la SICAV tributan al 1%, tributación ridícula al invertir en SICAVs, hasta que no se realizan ventas de acciones, lo que permite un aplazamiento fiscal y una mayor capitalización de los rendimientos (lo que se ahorra en pago de impuestos va dando beneficios) o incluso no pagarlos nunca tributando a impuesto de sucesiones o donaciones nulo en algunos casos.
Diversificación del riesgo:
Al invertir en SICAVs, se está participando en un amplio abanico de activos financieros (fondos, acciones, SOCIMIs, renta fija…), lo que ayuda a dispersar el riesgo. Esta diversificación es difícil de alcanzar para un inversor individual con un capital más limitado. El no tener un capital mínimo de inversión (una acción) hace que la diversificación sea más fácil.
Gestión profesional:
Las SICAVs son gestionadas por profesionales del sector financiero, lo que asegura una gestión experta de la cartera de inversiones. Esto es especialmente valioso para inversores que no tienen el tiempo o la experiencia para gestionar sus propias inversiones. Aquí puedes ver resultados de dos de ellas, Sidiclear SICAV y SidiGREEN SICAV.
Liquidez:
Las acciones de las SICAVs se pueden comprar y vender con relativa facilidad (igual que se venden y compran acciones en mercado continuo), proporcionando una liquidez comparable a la de las acciones cotizadas. Esto permite a los inversores tener un acceso rápido a su capital en caso de necesidad.
Invertir en SICAVs puede ser una opción estratégica para aquellos que buscan estas ventajas, aunque como en toda inversión, es importante considerar los riesgos asociados y asegurarse de que se ajustan a tu perfil y objetivos de inversión.